Estaréis pensando: "Bueno, ya era hora. Ya te valía, tío". Y es que lo mejor de mi profesión es, hay que admitirlo, tener unas vacaciones larguísimas. Vacaciones que oficialmente se me acabaron el 1 de septiembre, pero que, teniendo en cuenta que el Jueves sólo acudí a mi centro del año anterior para hacerme cargo de improbables reclamaciones y ejercer de destructora de documentos, y que el lunes ya ni me pasé —para el viernes tengo disculpa: era festivo— podemos alargar hasta hoy.
Eso para mí, que me he pedido unos cuantos grupos de primero de la ESO —es que es un gusto eso de que vengan con material a clase desde el primer día— porque algunos de mis compañeros no comenzarán hasta la próxima semana, amparándose en el hecho de que si todavía hay gente matriculándose (e incluso reclamando notas de septiembre) es imposible que el curso comience mañana, que es la fecha prevista.
Tal es la situación en el instituto pata negra de Madrid Centro que me ha caído en suerte. Sé que en Madrid Sur la cosa es completamente distinta. Seguramente mis compañeros de Getafe habrán hecho encaje de bolillos para dar mañana una apariencia de normalidad, normalidad que no hay por donde agarrar a menos que se siga, como en los colegios, el criterio de agrupar a los chavales por orden alfabético —que, por otra parte, es un criterio pedagógico como otro cualquiera—. Pero es que hay que controlar al proletariado rabioso.
En este Madrid que, en comparación, debe de ser Pijolandia —aunque los rasgos de los clientes griten que el personal es el mismo— no estamos tampoco libres de calamidades, como la que ha afectado a una compañera que, en el momento de asignar horarios —no en agosto, cuando se pasó por el instituto, ni el primero de septiembre, cuando se volvió a pasar, ni a primera hora, antes de realizarse el claustro, ni al terminar éste— se ha enterado de que su media plaza había desaparecido.
De puta madre. Quieren que empecemos MAÑANA y ayer, a las 9 de la noche, confirmaron cuántos profesores iban a trabajar en este instituto.Luego, claro, hablan de calidad y esas cosas, pero a mí todo esto sólo me recuerda que trabajo en ESPAÑA y con SERES HUMANOS. Lo peorcito, vamos.
Y es que espero ayudar con mi tarea a que, en la próxima generación, 'ser humano' o 'español' signifiquen algo completamente distinto, al menos para mí. Pero, por el momento, esto es lo que hay. Que tiren el Chupinazo, que ya comenzamos.
1 comentario:
Hola a todos:
Jose que te sea leve. En Andalucia comienza secundaria el 15 y a partir del 16 a descontar fechas. Buen curso.
Saludos a todos.
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