LE GUIN, Ursula K.: Historias de Terramar. Edición completa, Minotauro, 2006
ISBN:
9788445076217 (no aparece en Agencia Española del ISBN)Descripción física: 1 volumen; 1117 p.;24 cm
Género: Espada y Brujería; Fantasía épica
Precio: 28€ en la Casa del Libro.
Llama la atención que, frente al éxito de otros clásicos de espada y brujería a veces menos conocidos, como
Crónicas de Narnia o
La Brújula Dorada, haya pasado casi desapercibida la reedición en un solo volumen del clásico de
Ursula K. Le Guin,
Historias de Terramar, a pesar del estreno de la
adaptación cinematográfica de Goro Miyazaki y de la emisión televisiva de una
miniserie sobre la saga, todo alrededor de las navidades pasadas.
El volumen ahora editado por Minotauro (la fecha de crédito es de 2006; no lo he visto en librerías hasta finales de 2007 y su ISBN
no figura en la base de datos de la Agencia Española, aunque sí en el depósito legal) comprende las novelas mayores de la saga:
Un mago de Terramar,
Las tumbas de Atuan,
La costa más lejana,
Tehanu y
En el otro viento, dejando de lado los libros de relatos breves. Esto permite apreciar fácilmente la evolución de este mundo a lo largo de los treinta años de redacción, así como una cierta simetría en la construcción de los relatos (a pesar del hecho de que el plan inicial de la obra constaba sólo de los tres volúmenes dedicados a la
Gesta de Ged).
Nunca he creído en la existencia de una literatura femenina (como tampoco en una literatura de cojos o de mancos, aunque cojos y mancos escritores haya habido famosísimos). Sin embargo, leyendo los libros de Terramar se aprecian similitudes conotros libros de EyB escritos por mujeres (de hecho, varias partes me han traído recuerdos de
Olvidado Rey Gudú, de A. M. Matute). No sólo es que los libros impares tengan por protagonista a una mujer —una mujer que ejerce de tal, sin intentar arrogarse un rol masculino—, sino que el relato abandona en muchas ocasiones lo épico para centrarse en la psicología de los personajes y en una especie de perspectiva intrahistórica.
La primera novela del volumen,
Un mago de Terramar, nos presenta a Gavilán (Ged), personaje recurrente en novelas posteriores, y define el funcionamiento del mundo en que sucede la acción: Terramar (Earthsea), un archipiélago rodeado de mar abierto, más allá de cuyos confines las leyes del mundo cambian. En las islas de Terramar, y especialmente en Roke, existe la magia, pero sólo pueden utilizarla aquellos que han nacido con un don y, además, conocen los
nombres verdaderos de las cosas. Pues hay un antiguo lenguaje, ya sólo dominado por los dragones, en el que hablar es hacer. Sin embargo, el poder de los magos se ve limitado por la necesidad de conservar el equilibrio, pues en caso contrario pueden suceder grandes desastres (como veremos en las novelas tercera y quinta). Un último e importante elemento que se nos presenta en esta primera novela son los
poderes terrestres, piedras (o quizá lugares) capaces de dominar a las personas y absorber su don mágico.
Las Tumbas de Atuan nos presenta una aventura de Gavilan previamente mencionada en
Un mago de Terramar: el robo del Anillo de Errek-Akbé, que forma parte del tesoro de Atuan. Por eso, sorprende al lector que la mayor parte del libro se dedique a describir la preparación de Arha, la Devorada, como Suprema Sacerdotisa de Atuan, un lugar cuya aridez contrasta bruscamente con el carácter marítimo de Terramar. Solo cuando nos hayamos contagiado de la atmósfera opresiva de normas y tabúes que rodea a la protagonista aparecerá la acción, e incluso entonces el libro seguirá siendo muy distinto del primero de la saga.
El tercer libro de la trilogía inicial,
La costa más lejana, es de nuevo una aventura marcada por el movimiento y la acción, en oposición al estatismo del libro de Arha. Un desequilibrio en la Magia ha anulado los poderes de casi todos los magos; Gavilán, ahora convertido en Archimago, deberá buscar sus causas indagando en los confines del archipiélago, hasta llegar a la costa más lejana, Selinor, hogar de dragones, y más allá, al tenebroso mundo de los muertos que se nos presentó por primera vez en
Un mago de Terramar. De ahí regresará Ged privado de sus poderes, al contrario que su joven acompañante. Ello permite cerrar la Gesta de Ged, el imaginario ciclo que narraría la recuperación del esplendor pasado de Terramar gracias a Gavilán.
Tehanu es, como en parte
Las Tumbas de Atuan, una novela doméstica, sin apenas acción, que nos presenta a una Tenar abuela, acompañada de una jovencita, su hija adoptiva, cuya vida ha sido marcada por el maltrato. Junto a Tenar acude un Gavilán anciano y privado de poderes que nos abre un tema que reaparecerá en la siguiente novela (aunque ya estaba presente en la anterior): la sensación de inutilidad del hombre que ha perdido su profesión.
La novela
En el otro viento cierra el ciclo explicando la causa del funcionamiento de la magia en Terramar: el equilibrio no es tal equilibrio, es una especie de pacto que permite a los hombres del archipiélago tener unos poderes que, en otras tierras, son de dominio exclusivo de las deidades. Toda esta liquidación del sistema mágico produce cierto malestar en el lector, al que se priva de la magia y de la esperanza. También hay una ruptura con una convención de los libros anteriores: una trama está protagonizada por un mago, pero es un mago de aldea, más cercano a Tenar o al viejo e inutil Archimago que a los magos de Roke, y además está atormentado por una maldición; en otra trama paralela, el Rey, Tenar y Tehanu tratan de contener la amenaza de los dragones, que parecen haber abandonado los confines de Terramar. Y por tanto, ya no hay la alternancia de protagonista masculino / protagonista femenino de los libros 1 y 2 (ni siquiera la alternancia nuevo personaje masculino-nuevo personaje femenino que se da en los libros 3 y 4, pues junto con el mago de aldea se nos presenta a un personaje femenino importante,
Omr Iriam). A pesar de todo esto, es un buen cierre a una saga en la que he visto grandes logros: entre otros, la mejor explicación
etológica del comportamiento de los dragones.
¿A qué edad recomendar este libro? Por un lado, el lenguaje es sencillo pero no simple: como es habitual en el género, aparece un vocabulario rural, botánico y zoológico que pueden desconocer los lectores, pero que no les debería ser difícil de asimilar. Por otro, el tono moral de la obra infunde toda una serie de valores (el esfuerzo, la responsabilidad, la alegría por el trabajo bien hecho) a la vez que hace reflexionar sobre realidades del mundo, como en una parábola sin moraleja evidente. A diferencia de
El Señor de los Anillos o
Taron y el Caldero Mágico, el sexo no se escaquea de la narración (al menos en la cuarta novela); pero, frente al sensualismo banal de las sagas de Conan o Eric de Melniboné, es tratado con naturalidad, y con el mismo cuidado se maneja la violencia. Finalmente, el elemento de volumen: 1100 páginas distribuidas entre 5 novelas son algo asequible para un joven, al menos si se lee cada novela por separado. Por ello, puede ser un interesante libro para jóvenes lectores hartos de Harry Potter, si bien el libro 2º no creo que guste a los más pequeños de la casa. Aunque, quién sabe, siempre se puede probar...